18/10/2022
En el 2do Encuentro de Estudios sobre Paradiplomacia e Internacionalización Territorial se realizó la Mesa de trabajo 2, sobre las experiencias comparadas del estudio de la paradiplomacia.
Mariana Dánae Pérez y Saúl Gopar Ensaztiga presentaron una investigación sobre los gobiernos locales en México y la diplomacia que estos realizan, así como sus características. A partir de ello, se muestra que no está institucionalizada este tipo de prácticas, por ende, se modifica con cada administración. La metodología que utilizaron se centra en delimitar y seleccionar a los sujetos de estudio, que en este sentido serían las ciudades / municipios y Estados con la capacidad de realizar este tipo de actividades. Luego se establecieron 18 indicadores para medir los temas de diplomacia local; entre los que se encuentran la agenda 2030, la salud, comercio, entre otros. En su experiencia, la síntesis y redacción fueron elementos de metodología que utilizaron y con base en sus resultados, obtuvieron que el centro norte fue el más activo en cuestión de diplomacia local, mientras que el más baja fue el suroeste. A nivel de entidades federativas, Jalisco es el Estado con más actividades internacionales durante el periodo analizado.
En cuanto a las ciudades, San Luis Potosí fue al ciudad que más actividad internacional realizó, especialmente la cultural. A continuación, Darla Balbosa de Almeida, habló sobre ejemplos de paradiplomacia en Brasil, primeramente definiendo la comunicación como determinante para la proyección internacional. El objetivo de su estudio fue comprender cómo en una temporalidad inestable se logra comunicar hacia el exterior. A partir de aquí se entiende que la diplomacia es en gran medida comunicación. Es decir, la imagen que proyecta un país tiene objetivos, entre ellos la atracción; sin embargo, en un ambiente inestable (el caso de Brasil durante la pandemia) se intentó cambiar su postura hacia el exterior, desde la independencia a la cooperación.
En un ejemplo muy claro de paradiplomacia, cuando el país a nivel federal rechazaba las vacunas, los actores locales (Estado de São Paulo) utilizaron esta práctica para gestionar las vacunas e importación de equipo médico, a pesar que la Federación no lo gestionó, que es la que maneja principalmente las relaciones al exterior.
En otro tema, Adriana Huerta-Núñez, quién estudia la escalas la proyección internacional de las ciudades en el caso de la ciudad de Puebla. Se refirió que hay niveles en la inserción internacional de una ciudad, pero participan diferentes actores, entre ellos la iniciativa privada, las universidades y sociedad civil. Su hipótesis es que en la proyección internacional puede confluir intereses de diferentes niveles; su caso de estudio fue al ciudad de Puebla y su insercion internacional. Su proceso inicia con las exportaciones e inscripsión como patrimonios de la humanidad y diferentes procesos de integración económica como el Plan Puebla-Panamá. Los tres niveles (federal, estatal y municipal) se interesan en insertar una ciudad a nivel internacional. Las variables en esta inserción son los cambios en la política, es decir, la alternancia en las administraciones gubernamentales.
Para finalizar, Omar Cornejo Caldera, hace un análisis de la diplomacia cultural de la ciudad de Hiroshima, Japón. Su estudio se centra en la llamada Diplomacia cultural de la paz, la cual es una critica a la cultura bélica desde la concepción de las relaciones internacionales y sus teorías, puesto que éstas normalizan un sistema de violencia. Sin embargo, existe un marco teórico sobre la paz y de las que se desprenden: la paz perfecta, paz imperfecta y paz neutra. A partir de esto, la paz imperfecta reconoce al conflicto dentro del universo, puesto que es una característica de los seres vivos, pero sin que de ella salgan conflictos violentos. Después construyó un análisis de caso desde la relación de Japón post-guerra de la Segunda Guerra Mundial y posterior a las bombas atómicas en Hiroshima y Nagasaki. A partir de esto nace la diplomacia y actores no tradicionales para el desarme. Las ciudades de Hiroshima y Nagasaki se han destacado por promover una visión de un mundo sin armas nucleares, también se institucionalizó que sus alcaldes apuesten por la paz y promuevan los lazos.